AMIG@S:
Aquí os dejo mi nueva ocurrencia, como continuación o segunda parte de una obra que escribí hace tiempo.
En esta ocasión, al igual que entonces, va sobre tiempo...
El tiempo que pasa sin detenerse, y pasa a engrosar el espacio del olvido...
Espero que os guste.
...Y no os olvidéis de dejarme vuestros comentarios...
Gracias...
Saludos...
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MI VIEJO RELOJ (II)
Atrás quedan los minutos,
derramados del reloj;
caídos desde su esfera,
con un monótono son.
Apilados en el suelo
yacen en el rincón;
olvidados en el tiempo,
bajo aquel viejo reloj.
Un reloj de blanca esfera,
que brilla a la luz del sol,
donde resaltan cifras negras;
las de mi viejo reloj.
Las saetas que caminan
en la esfera del reloj,
van recorriendo las cifras,
con su exasperante son.
Y marcan las horas que faltan,
hasta el fin de la creación,
donde al final se detendrán
...las agujas del reloj...
©JotaJota 2013
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Me guata tu poema tanto como me gustan los relojes derretidos de Dalí. Un reloj: ese invento para contar el tiempo. El tiempo... ¿Existe más allá de nosotros mismos?... La poesía y el tiempo son grandes incógnitas: aquí se unen. Y suerte que hay perwsonas como vos, javier, que escriben poemas. la vida sería tan sólo un reloj sin ella. Cariños. Rosita.
ResponderEliminarEfectivamente Rosita, la vida sería tan sólo un reloj sin nada mas que ofrecernos que un sin fin de monótonos tic-tac, que nos conducen a un final irremisible; mas gracias a las pocas alegrías que nos da la vida, sumado a esos pequeños placeres del día a día, entre los que se cuenta, al menos para mi, el escribir mis poemas, hacen que la vida se pinte de color.
EliminarDe color verde esperanza; como debe ser, aguardando con ilusión lo que nos depara el mañana.
Besos Ro.
...Gracias por estar...